En mi caso, quise representar el concepto de la fe en la cultura mexicana; siempre apegada a ídolos que combaten ante hechos que uno no puede lograr. El caso del boxeador en la cultura mexicana me parece a mi algo similar a lo que describo antes. Un ser en el cual se deposita la fe para ganar un combate. Incluso se apuesta la confianza (dinero, vida, etc.) en su persona. Por una parte, me confieso fanático del boxeo, por causas que desconozco; por otro lado, siento un profundo respeto por el fervor hacía la Guadalupana. Encuentro asociaciones curiosas en ambas partes, box y fé religiosa, y fue un placer realizar este cartel.
Dicho sea de paso, fue un gozo ver, oler y tocar la serigrafía de esta Guadaluchadora.
Acá el link del sitio donde pueden conseguir las serigrafías: http://manodepapel.com/virgenes.html
